Toda aventura que comienza tiene unos orígenes, un
pasado a sus espaldas y un camino por recorrer. Un por qué de aventurarse en
algo nuevo y un cómo, cargado de incertidumbre e ilusión.
Todos los comienzos son difíciles: requieren de un paso
cargado de fe y voluntad, pero que arrastrará dudas y miedo. Salir de una
rutina establecida y aventurarse en algo diferente siempre ha sido costoso para
la humanidad; no por falta de ganas e iniciativa, sino por exceso de miedo y
condicionamiento social. ¿Y a qué le puedo temer, si yo soy una persona decente
y madura?, se preguntarán algunos. Miedo al fracaso, miedo al qué dirán, miedo
a salir de una rutina diaria, miedo a dar un paso en una página en blanco, sin
saber muy bien qué es lo correcto y cuando me estoy equivocando; y es este
temor innato que todos tenemos alguna vez, el que en muchas ocasiones, nos roba la llave para abrir una gran
puerta, una oportunidad que con el tiempo nos llevaría a algo mejor.
Y por otro lado ese tóxico condicionamiento social,
que te dice “no puedes”, “sueñas demasiado” o “no estás capacitado, deja de
intentarlo”. No hay que ser muy astuto para darse cuenta de que en nuestra vida
siempre aparecerá gente que tratará de manipular tu forma de ver las cosas, tus
acciones y controlar tus ilusiones. Desde el escalón más pequeño de un profesor
frustrado, hasta el puesto más alto de un político insensato. Pero depende de
ti que lejos de ahogarte en pequeños charcos que te marca la sociedad como un
límite en tu vida, afloren tus ganas de dar un paso más y descubrir ese mar
infinito de posibilidades que está deseando ser descubierto, pero que quizás
aún no puedas ver; todo lleva su proceso, y ver el vaso medio lleno cuando ha
estado medio vacío toda la vida, no es algo que se logre de la noche a la
mañana. Pero sí es posible, sólo cierra los ojos para ver todo aquello que de
verdad merece la pena.
Por todo ello surgió la idea del blog, viendo esto
como una oportunidad de hacer públicas voces que habitaban en el silencio y que
ahora tratan de huir de ese miedo y condicionamiento social que marcan nuestras
vidas, aunque seguramente no siempre seas consciente de ello. Algunos no
entenderán todo esto y lo tomarán como palabrería vacía, y aunque sé que no voy
a descubrir un mundo que ya está descubierto, intentaré mostrar un punto de
vista de la realidad diferente al que nos quieren hacer ver. Os invito a continuar conmigo esta aventura y por eso se
establecerán encuestas con voto anónimo y que lejos de seleccionar una simple
respuesta, te llevarán a una reflexión interna. Con los resultados estadísticos
se elaboraran entradas reflexionando a cerca de ello y también espero frases
vuestras o que os gusten para el apartado “el cofre”. Para alguna sugerencia, o
reflexión que queráis hacer tan sólo escribirme, porque éste no es un blog
personal, sino el lugar de todos aquellos que buscan la verdad en una sociedad
donde la apariencia, el materialismo y el interés están a la orden del día.
Éste será mi punto de partida: la colaboración de aquellos que buscan un mundo
mejor.